Ciudadanía para Tres Generaciones
Tomando el juramento a la bandera produce un inmenso alivio para cientos de miles de inmigrantes cada año, pero el estrés que rodea al estatus migratorio no siempre acaba ahí.
Marie*, una nigeriana mamá soltera de tres hijos y la principal cuidadora de su papá, se registró para una clínica legal de inmigración en Maryland preguntando sobre ayuda con la ciudadanía. Como la única persona que puede trabajar en su familia de 5 personas, Marie luchaba para pagar por los gastos diarios de su familia. Ella ya había hecho su juramento a la bandera unos años antes, y sus hijos - que entonces eran menos de 18 años - habían obtenido la nacionalidad estadounidense. Pero no es tan sencillo.
Porque sus hijos habían obtenido la nacionalidad estadounidense y no habían tenido que pasar por el proceso formal de naturalización, no había ninguna prueba legal de su naturalización.
Aunque todavía no se había convertido en un problema, Marie le preocupaba que, una vez que sus hijos cumplieran 18 años, necesitarían una prueba de ciudadanía para varias solicitudes y certificaciones que querían obtener.
Para solucionarlo, Marie tendría que aplicar por los certificados de naturalización de sus hijos. A $1,170 cada uno, Marie tenía que desembolsar $3,510 más los honorarios de los abogados solamente para demostrar que sus hijos eran ciudadanos estadounidenses. El coste era astronómico para ella, y algo que sencillamente no podía permitirse.
El padre de Maria también cualificó por la nacionalidad estadounidense, pero la tarifa de solicitud de $725 y los honorarios adicionales de los abogados le impidieron una vez más seguir esta vía. La abogada gerente de Maryland y DC, Sarah Selim Milad, se reunió con Marie para escuchar su historia y encontrar una manera de ayudar a los hijos de Marie y a su padre. Con la ayuda de voluntarios y una generosa subvención de la Iglesia Presbiteriana, Sarah pudo solicitar con éxito la extención de tarifas para los tres certificados de naturalización e inciar el proceso de naturalización para el papá de Marie. Marie ya no tiene que preocuparse de aportar pruebas de la ciudadanía de sus hijos y está ayudando a preparar a su papá para la entrevista de naturalización.
*Nombres ficticios por motivos de privacidad.